Soy ecléctico ¿y qué?

Un estilo rústico no tiene porque encasillarse, no solo los acabados de madera o el estilo inglés tienen cabida en las segundas viviendas. 

Son lugares para disfrutar y por lo tanto para el ocio y la tranquilidad, abandonarse a una calma que no tenemos en los días de diario, para disfrutar de la conversación de las visitas mientras terminamos de preparar la cena o hacemos la merienda para un nutrido grupo de fierecillas que acompañan a nuestros hijos.

El diseño de una cocina para una vivienda de vacaciones debe adaptarse más aún si cabe a nuestros gustos e ir acompañada de poco mantenimiento para que nuestros días libres no terminen siendo de trabajo.

Antes de decidirte por un diseño de cocina y un modelo de puerta, no olvides reflexionar sobre tus prioridades para que tu satisfacción sea infinita cuando finalmente la veas instalada en casa.

¡Más madera!

        Tanta madera no cansa, no se pasa de moda, no enfría el ambiente, ... y es extremadamente decorativa.

El año se llena de combinaciones de madera y de maderas combinadas.

Este diseño busca una uniformidad con la tarima del suelo, que rompe con la península en color oscuro y encimera del mismo material. 

Linealidad es el gusto que busca una profundidad en el ambiente.

Cocina para vivirla

Otro ejemplo de cocina sencilla que está pensada para vivirla, disfrutarla y sin buscar complicaciones. Diseño y funcionalidad de la mano.

Resaltan las estanterías de la izquierda que hacen de almacenaje visto y mixto, de apoyo auxiliar al menaje diario.

Los muebles encastrados de la derecha, se han rematado con pladur para dejarlos empotrados en la pared, dejando un conjunto más liviano que si fueran vistos. 

La pared alrededor de las torres se aprovecha de pizarra y tablón para recados que otorga un toque fresco a la estancia.

Geometría estética en la cocina

Ya que seguimos a principio de año, vamos a continuar hablando de las tendencias que vienen y serán muy familiares para todos hasta final de año.

Los juegos geométricos en suelos de cocina, alternando blancos y grises o negros. Cuadrados, rombos, polígonos que nos rodean y dan un aspecto señorial a la estancia adquiriendo protagonismo.

Una cocina clásica, puede verse de otra manera optando por cambiar el color de la puerta blanco por otro rompedor, como el rojo o bien cremas o grises que armonicen el conjunto.

Negro que te quiero negro

Ser valiente en las elecciones que a uno le gustan y decidirse por lo que nos llama la atención, ahora es más fácil porque las tendencias nos llevan a colores oscuros y mates para nuestra cocina.

Una buena iluminación es la clave para que estos espacios no sean agobiantes, sino que den profundidad precisamente por esos negros.

Nos pone muy fácil la decoración con color de la estancia, ya que con el negro todo combina muy bien y le otorga vida con muy poco.

Si esta es una de tus preferencias... decídete por ella.